MUJERES IMPRESCINDIBLES PARA LA PAZ
La victoria del presidente Gustavo Petro y la vicepresidenta Francia Márquez en las elecciones de junio de 2022 en Colombia ha supuesto un histórico cambio social y político al ser el primer gobierno de izquierda en la historia contemporánea del país. Este cambio ha despertado grandes esperanzas y expectativas entre amplios sectores, en el país y en la comunidad internacional, al incluir en su programa propuestas en materia de DD.HH., inclusión social y con un enfoque étnico.
El nuevo gobierno ha mostrado su compromiso con la implementación del Acuerdo de Paz firmado en el 2016, que durante el mandato de Iván Duque había sufrido una importante desaceleración. Ha incluido temas fundamentales en la construcción de la paz en el país, como la elaboración de un Plan de Acción Nacional para la aplicación de la Resolución 1325 de Naciones Unidas, la puesta en marcha de una política exterior feminista, la garantía de protección de lideresas y defensoras de DD.HH. o el cumplimiento de las recomendaciones incluidas en el Informe Final de la Comisión de la Verdad.
Además, las mujeres participantes de las IV Jornadas saludamos el anuncio de las conversaciones de paz entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional -ELN-, con la exigencia de que éstas se lleven a cabo con la presencia de mujeres en todas sus fases.
El próximo 24 de noviembre se cumplirán seis años de la implementación del Acuerdo de Paz; y las participantes en las Jornadas reafirman la importancia del papel de las mujeres en la construcción de la paz en el país. El avance en la construcción de la paz y el cumplimiento de los DD.HH. no es posible sin la participación de las mujeres. Por ello, es necesario que el nuevo gobierno recoja las propuestas y el acervo de las organizaciones de mujeres de Colombia.
Subrayamos la importancia de las alianzas internacionales de mujeres y la diplomacia feminista por la paz.
SOLICITAMOS AL GOBIERNO DE ESPAÑA
1. Manifestar su total apoyo a la implementación integral del Acuerdo de Paz, con la participación activa de todas las comunidades y de las organizaciones sociales de Colombia, de manera concertada, eficaz e integral, cumpliendo con los enfoques de género, étnico y territorial; y a la propuesta de Paz Total.
2. Apoyar decididamente el Sistema Integral para la Paz y, de forma específica, el cumplimiento de las recomendaciones incluidas en el Informe Final de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad.
3. Apoyar al gobierno de Colombia, como responsable de garantizar la vida y el ejercicio de los derechos de las mujeres, lideresas y defensoras de DD.HH. y excombatientes, para que tome las medidas adecuadas y efectivas para su protección.
4. Respaldar al gobierno de Colombia en la elaboración y puesta en marcha de un Plan de Acción Nacional para la aplicación de la Resolución 1325 de Naciones Unidas, contando con la participación de las organizaciones de mujeres y feministas.
5. Alentar y apoyar al conjunto de las instituciones públicas del país para el reconocimiento efectivo de los derechos de las víctimas de violencia sexual asociada al conflicto armado, posibilitando a las mismas su acceso a la justicia; y, particularmente, a la Jurisdicción Especial para la Paz para la apertura del macrocaso sobre violencia sexual.
6. Apoyar la realización en España de una conferencia internacional de mujeres refugiadas y exiliadas, junto al movimiento de mujeres en Colombia, que posibilite su participación activa en el proceso de paz.
7. Apoyar a las organizaciones de mujeres y feministas de Colombia para la implementación integral de las medidas de género incluidas en el Acuerdo de Paz.